HA NACIDO UNA NUEVA LEYENDA URBANA
Ahora en mi pequeña ciudad de provincias ha surgido una de esas leyendas urbanas tan típicas como escalofriantes o ridículas. En esta, un anciano marido encontró a su fiel esposa maniatada y con un pañuelo en la boca en un almacén de unos chinos, cuando fueron allí a comprar. No sabemos qué, porque yo nunca he ido a comprar a un almacén, si descontamos el economato, que tantos recuerdos me trae.
El caso es que el fiel esposo se quedó en la puerta esperando y como veía que el tiempo pasaba y su mujer no salía, se decidió en ir en su busca. Preguntó a los que allí estaban, pero le aseguraron que allí no había entrado nadie. Ahí fue donde empezó a sospechar y a ponerse furioso. Los chinos, que, como se sabe, sólo son capaces de maniatar a mujeres, no pudiendo ante las embestidas del senil amante, cedieron y se descubrió el pastel. Con fortuna para todos.
De ahí se concluye, según me dicen mis compis del trabajo, que no se debe de ir a comer a los restaurantes chinos. Una vez más. Porque, nunca mejor dicho, nos dan gato por liebre.
Como yo recelara, el domingo me acerqué al restaurante de mi calle, clientes habituales míos, y les pregunté qué había de cierto en todo aquel embrollo. Y me dijeron que no me preocupara, que habían sido rumanos, no ellos. Menos mal, les dije, porque me entusiasma su pato laqueado pequinés y no era plan de deshacerme de él así como así.
Yo había oído también lo de los rumanos, así que decidí apostar por esta última versión, acompañando el pato con mi-fen frito con gambas. No es que yo tenga nada contra los rumanos, pero ellos no ponen restaurantes baratos en España.
Y aquí es donde viene la moraleja, lo de las mitologías. Porque unos chinos maniaten a una mujer, ¿son todos los chinos de idéntica calaña? ¿Todos los africanos son caníbales? Como George Bush fuera idiota, ¿acaso ha de ser idiota su hijo Junior? Si Dinio la tiene como un caballo, ¿con qué le da de comer Castro a todos los cubanos?
Decían los griegos que los pobres mortales pagaban las penas de sus mayores, si sus padres no habían expiado todas sus culpas. Me da a mí que por eso Homero se centraba tanto en Telémaco. Por lo visto, tampoco hemos avanzado casi nada en eso de las mitologías.
La foto es de Zheng NONG (http://www.pbase.com/zhengnong) y tenéis una pequeña muestra de fotografía china actual en www.enfocarte.com/2.15/especial/zheng.html.
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